Análisis de suelos: herramienta clave para agricultores venezolanos
21 de febrero de 2024 Hora: 10:50
Hay distintos tipos de suelos, según distintos tipos de cultivos que se quieran implementar. No hay un suelo estandarizado o una medida universal, pero sí se pueden hacer adecuaciones de un suelo para potenciarlo y sacar el mejor provecho. Es uno de los objetivos del Laboratorio Nacional de Suelos y Aguas de Riego, Lansar, dependiente del Instituto de Tierras.
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Analizan propiedades estructurales de la tierra, como textura y otros análisis físicos. También fertilidad y para ello deben buscar los nutrientes disponibles, los principales nitrógeno, fósforo y potasio, pero también calcio, magnesio, azufre, hierro, zinc, cobre, entre otros. Además, el pH que, en simple, es el grado de acidez de los suelos. Todos estos análisis se realizan en tres laboratorios, de Lara, Guárico y Caracas.
El laboratorio de Caracas es una muestra de empoderamiento femenino, porque trabajan sólo mujeres al mando de María Teresa López, jefa de la Red de Laboratorios Lansar. Aquí reciben muestras y también coordinan las salidas a terreno para ayudar a tomar las muestras de la forma más eficiente.
“Es primordial que antes de la toma de muestra sepamos qué rubro van a cultivar, porque dependiendo del rubro es la profundidad que se va a hacer en la toma de muestra. Si es un ciclo corto es de 25 a 30 centímetros, si es un ciclo largo entre 35 y 45 centímetros o si es frutales pudiese ser entre 30 y 60 centímetros”, dice López, mientras enseña a usar el barreno, la herramienta para hacer huecos en la tierra y sacar las muestras.
Trabajo de laboratorio
Una vez finalizado el trabajo de campo, las muestras se reciben en el laboratorio para realizar las pruebas y el tratamiento: reducir humedad, homogeneizar y retirar los restos orgánicos.
Katherine Balza, técnico del laboratorio, explica que obtienen diversas muestras, de distintos grosores, usando cernidores como los utilizados en repostería, para la harina. Cada muestra servirá para distintos experimentos según lo que se quiera buscar. Ahora es cuando comienza el análisis químico, de pH y otros componentes.
“Normalmente entre 6.5, 7.5 es un pH ideal, ya cuando son más bajos o muchísimo altos, entonces ya uno ve si el pH es ácido o alcalino y de acuerdo a eso se hace la recomendación al productor y conjuntamente con los resultados de la textura y de los macro y microelementos para saber una recomendación certera acerca de su cultivo o de lo que el productor desee cultivar”, señala Yorlei Barrios, especialista técnica del laboratorio Lansar.
“Eso va a depender también del cultivo que el productor nos diga que quiere obtener”, acota Mileidy Luna, también técnico de laboratorio. Ellas se encargan de procesar las muestras y manipular los instrumentos de laboratorio hasta obtener un informe para los campesinos.
“El estudio de suelo creo que es parte fundamental para el desarrollo productivo, sostenible, agrícola de Venezuela”, acota María Teresa López. Es una herramienta de gran utilidad para diagnosticar problemas nutricionales y establecer recomendaciones.
Tener estos datos permite planificar y asegurar la eficiencia y rentabilidad de los cultivos, para David Hernández, presidente de Instituto Nacional de Tierras, los “campesinos y campesinas que tienen acceso a esta tecnología, tienen acceso a conocimiento y eso genera, por supuesto, mayores riquezas, mayores beneficios para la familia que produce y trabaja la tierra”
En 2023, el volumen de producción agrícola se incrementó en 5 por ciento, según indicó el Gobierno en recientes informes de gestión. Este laboratorio y la implementación de otras políticas públicas para el campo, permiten incrementar la productividad de las tierras venezolanas.
Autor: teleSUR - Leonel Retamal Muñoz